29 jul 2013

- DE LOS OJOS VENDADOS Y “LO QUE HAY PUESTO SOBRE LA MESA”-

Re-pensando dichos, tengo la sensación de que "me han vendado y me he vendado  los ojos" en muchas ocasiones…y que suelo repetirlo.
Recuerdo que me vendaban los ojos para darle a la piñata, para quebrar, para que se rompiera, para alargar la ruptura… para que no viera dónde estaba… tenía que escuchar e ir por donde me decían: “abajo, arriba, abajo, arriba”.
Luego me sentaba a la mesa y me decían que una puede escoger, que “todo está puesto para todxs sobre la mesa”… pero la mesa medía tanto por tanto… y no todo cabía en ella. Y yo con los ojos vendados no veía lo que había en frente… y nadie me invitó a la cocina para escoger qué comer,  y nunca pasó un previo paso aún, poder y saber sembrar cosechar por ejemplo lo que comeríamos .. más lejano aún.
Así me puse a recapitular historias sobre estos dichos, la justicia y  el vendado de ojos y lo que hay “puesto sobre la mesa” cuando una llega a sentarse y la mesa ya está servida… sin haber una participado en ello…
Escoger… no escoger… ¿cómo hacer?
-       Mi prima no escogió ser violada.
-       Mi otra prima no escogió vivir en una casa donde ayudaban al paso ilegal de migrantes chinxs.
-       Nunca decidí el contenido de los libros de texto
-       No decidí mi nombre
-       La vaca no escogió ser comida
-       No decidí que me miraran así mis tíos cuando salía de la alberca en traje de baño.
-       Mi hermano no escogió ser hombre.
-       Nunca escogí pagar por comer.
-       Nunca escogí por convicción ser empleada.
-       Mi abuela creo, nunca escogió el limpiar casas como “la mejor opción” de entre todas las que tenía, o que le dijeran "india pata rajada" por ser quien era y hacer lo que hacía.
-       Nunca escogí nacer en un mundo en que se ejerciera-ejerciéramos la imposición, la fuerza y la violencia desde la cama, la casa, las calles, la sopa y el saludo.
-       ¿Quién escoge como convicción ser perseguidx?
-       ¿Kién escoge por convicción ser torturadx, mutiladx, lastimadx?

Ya no me sentaré contigo… tendremos que eliminar la mesa, ¿o su contenido?, ¿o replantear el cómo llega una a la misma? 
 
¡¡¡precaución!!! Me digo: 

La justicia no puede ser una mujer con los ojos vendados que da a todxs por igual, nunca es igual.

¿Y si en el acto de elegir una decide “confiar”?¿y darse y dar?

¿Cómo sería tocar, acercarse, hablar, incendiar, abrazar con confianza?

¿Kómo lo haré?, ¿lo haremos?

¿Voltear la mesa?


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